LA BAGUETTE FRANCESA

Cuando se trata de pan, inmediatamente viene a mi mente, la baguette francesa.
 
Muchos tenemos lindos recuerdos en París, en las cercanías de la Torre Eiffel, en los Campos Elíseos, en algún café o Bistró. Baguette, queso y vino.
 
Te voy a contar la historia de este icónico pan de la boulangerie française. También te daré mi receta.
 
La baguette francesa es el ícono de la panadería francesa. Es un símbolo muy importante en la gastronomía francesa y mundial.
 
Su forma alargada, de crujiente corteza dorada, de interior esponjoso y de aromas envolventes, la hacen el acompañamiento ideal para una comida casual sin formalidades .
 
En esta nota, vamos a conocer más de cerca a la baguette francesa, su historia, características, maridajes y su receta.
 
 
La historia de la baguette se remonta al siglo XIX en Francia, cuando se popularizó en París como una alternativa al pan redondo tradicional.
 
La baguette se caracteriza por su forma alargada y delgada, que se asemeja a una vara o "baguette" en francés.
 
Su corteza crujiente y dorada se logra con una correcta técnica de horneado que involucra altas temperaturas y vapor. El interior es suave, con una miga alveolada que resulta en una textura ligera y aireada.
 
La calidad de una baguette a la francesa se puede apreciar en su sabor y textura.
 
La masa se elabora con ingredientes sencillos si se quiere: harina, agua, levadura y sal.
 
La fermentación lenta es muy importante, y el amasado correcto también, ambos son cruciales para desarrollar el sabor característico de este pan. Al morder una buena baguette francesa, se revela un sutil equilibrio entre el sabor ligeramente ácido de la fermentación y la suave dulzura del trigo recién horneado.
 
La baguette francesa es un acompañamiento versátil, se adapta a una amplia variedad de recetas y maridajes.
 
Personalmente me trae recuerdos de infancia, un café negro con un trozo de baguette untado con mantequilla; es un delicioso y sencillo placer de la vida.
 
Una costumbre popular en Francia es acompañar la baguette con una selección de quesos; desde el cremoso brie, mi preferido, hasta el intenso y no por poco, roquefort.
 
Para amantes de la charcutería, la baguette es el lienzo ideal para crear deliciosos bocadillos. Combina rebanadas de jamón crudo, salame o paté con rodajas de pepinillos en vinagre y hojas de rúcula fresca. Un vino tinto ligero es una compañía muy agradable.
 
Un clásico francés muy conocido, es el "bocadillo de jamón y queso caliente", Croque Monsieur. Se trata de una baguette rellena con jamón y queso gruyère, que se embellece con una bechamel cremosa, se gratina en el horno hasta obtener una capa dorada y crujiente. El resultado es un sándwich espectacular.
 
La baguette es perfecta para preparar tapas, como una deliciosa bruschetta con tomates frescos, hojas de albahaca fresca, aceite de oliva virgen extra y una pizca de sal marina. Es una combinación deliciosa. Ideal para acompañar con un vino rosado.
 
No cabe duda que la baguette francesa es un tesoro gastronómico que se lleva en los corazones de los amantes del pan en todo el mundo.
 
Ahora. ¡Ponte el mandil, enciende los fogones y vamos a cocinar!
 
Receta de Baguette Francesa
 
Ingredientes:
 
  • 500 g de harina de trigo
  • 350 ml de agua tibia
  • 10 g de sal
  • 5 g de azúcar
  • 7 g de levadura fresca

 

Instrucciones:
 
  1. En un recipiente grande, mezcla la levadura fresca con el agua tibia y el azúcar hasta que se disuelva por completo
  2. En otro recipiente, tamiza la harina de trigo y añade la sal. Mezcla bien los ingredientes secos.
  3. Agrega gradualmente la mezcla de levadura y agua a los ingredientes secos. Puedes hacerlo en varias etapas, removiendo y amasando con cada adición. Sigue agregando hasta que obtengas una masa homogénea y ligeramente pegajosa.
  4. Una vez que la masa esté bien mezclada, colócala sobre una superficie ligeramente enharinada y comienza a amasar. Amasa durante aproximadamente 10 minutos o hasta que la masa esté suave, elástica y se despegue fácilmente de tus manos.
  5. Forma la masa en una bola y colócala en un recipiente ligeramente engrasado. Cubre el recipiente con un paño limpio y deja que la masa repose en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora o hasta que duplique su tamaño.
  6. Una vez que la masa haya duplicado su tamaño, retírala del recipiente y colócala nuevamente sobre una superficie enharinada. Golpea suavemente la masa para liberar el exceso de aire.
  7. Divide la masa en 2 o 3 partes, dependiendo del tamaño que desees para tus baguettes. Estira cada porción de masa en forma de rectángulo y luego dóblala en tercios, como si estuvieras doblando una carta. Repite este proceso varias veces para desarrollar la estructura de gluten en la masa.
  8. Una vez que hayas terminado de doblar la masa, dale forma de baguette. Para ello, estira cada porción de masa y dóblala por la mitad longitudinalmente. Sella los bordes y presiona ligeramente la masa para que adquiera una forma alargada.
  9. Coloca las baguettes formadas en una bandeja para hornear previamente enharinada o cubierta con papel de horno. Haz unos cortes diagonales en la parte superior de cada baguette con un cuchillo afilado.
  10. Cubre las baguettes con un paño limpio y déjalas reposar durante aproximadamente 30 minutos, permitiendo que la masa suba nuevamente.
  11. Mientras tanto, precalienta el horno a 230°C.
  12. Una vez que las baguettes hayan reposado, colócalas en el horno precalentado y hornea durante aproximadamente 20-25 minutos o hasta que estén doradas y crujientes.
  13. Retira las baguettes del horno y déjalas enfriar sobre una rejilla antes de cortarlas y disfrutarlas.
Ahora tienes la receta para hacer auténticas baguettes francesas.
 
Recuerda que la práctica y la paciencia son clave para obtener los mejores resultados.
 
Bon appétit!
 
Firma: Alejandro Redondo Soto
Cocinero|Sommelier Profesional|WSET Level 3 Award in Wines & Spirits | Máster en Ciencias Económicas